El COVID-19, también conocido como SARS-CoV-2 o simplemente como coronavirus, ha supuesto un gran cambio para la población mundial.
Podríamos decir que se han producido cambios en la vida de las personas a tres niveles: salud o físico, psicológico y social. Aunque a nivel físico los cambios pueden ser evidentes, lo cierto es que, en muchas ocasiones, no reparamos en el aspecto psicológico y social. Aun así, estos dos últimos también tienen un gran impacto en nuestro día a día.
En el artículo de hoy vamos a analizar todos los cambios que se han producido o que se pueden producir en la vida de todas las personas. Además, también hablaremos sobre la capacidad de adaptación que tenemos los seres humanos ante estas situaciones complicadas que se van presentando a lo largo de la vida.
Cambios físicos o de salud
He comentado que estos son los más evidentes porque son los que se refieren a las personas que enferman. Es otras palabras, el COVID genera ciertos síntomas: tos, diarrea, fiebre, dolor de garganta, dificultades para respirar, etc.
Los cambios físicos que provoca el COVID son precisamente los que acabamos de mencionar. Los efectos del COVID en este ámbito son muy evidentes.
Cambios psicológicos
Con la llegada del virus también llegaron los confinamientos, restricciones, prohibiciones, etc. Esto a su vez generó ciertos síntomas a nivel psicológico. Los más importantes son:- Ansiedad. La ansiedad es generada, en gran parte, por la incertidumbre y el no saber qué podrá pasar en un futuro.
- Depresión. El empezar a ver la vida con pesimismo, no tener ilusión por el día a día, estar apático, etc. puede generar este trastorno del estado del ánimo.
- Conductas obsesivas y compulsivas. Las personas que ya tenían diagnosticado un Trastorno Obsesivo Compulsivo pueden haber visto agravados sus síntomas. Además, muchas personas han podido empezar a limpiar compulsivamente los alimentos, la ropa, las manos, etc. con el objetivo de que el virus no entre en sus casas.
Incluso hay personas que podrían llegar a sufrir Trastorno De Estrés Postraumático (TEPT). He dejado enlaces a artículos que hablan sobre estos temas por si alguien quiere ampliar información sobre cada trastorno.
Cambios sociales
Está claro que la manera en la que nos relacionamos con los demás ha cambiado. Ya no podemos saludar a las personas con la mano o darles dos besos, no podemos ir a lugares concurridos de gente, no podemos juntarnos muchas personas en una misma vivienda, etc.
Todas las medidas que se han tomado para intentar controlar el virus, sea el país que sea, han afectado en mayor o menor medida a nuestras relaciones sociales y a la forma que tenemos de relacionarnos.
Por ejemplo, dejamos de salir a tomar algo con nuestros amigos, pero empezamos a hacer videollamadas. En España, por ejemplo, el uso de las videollamadas aumentó mucho durante las semanas de confinamiento.
Por todo ello, podríamos decir que la manera que teníamos de relacionarnos hasta ahora ha cambiado por completo.
Capacidad de adaptación
Aunque el virus ha introducido cambios en nuestras vidas en muchos aspectos diferentes, lo cierto es que hemos tenido que aprender a adaptarnos. Los seres humanos tenemos una gran capacidad de adaptación que hace que enfrentemos de manera satisfactoria los cambios que se han producido en nuestras vidas.
Si observamos lo que está pasando a nuestro alrededor veremos que muchas personas han cambiado su destino de vacaciones, han aplazado su boda, han comenzado a reunirse en espacios abierto en vez de cerrados, han comenzado a llevar mascarilla para evitar la propagación del virus, han empezado a usar la tecnología para relacionarse con otras personas, las universidades y colegios han comenzado a realizar clases online, se fomenta el teletrabajo, empresas que antes hacían ropa ahora hacen batas para los sanitarios, etc.
Como podemos ver nos estamos adaptando y estamos siendo resilientes. Me gustaría destacar el concepto de resiliencia. Como ya comentamos en el artículo sobre psicología positiva, es la capacidad que tenemos las personas de reponernos tras un acontecimiento negativo.
Aun así, hay personas a las que les está costando un poco tener una buena capacidad de adaptación o que tienen una ansiedad excesiva. Si te está ocurriendo esto, te recomendamos que te pongas en contacto con un profesional de la psicología para que junto a él puedas desarrollar tu resiliencia y tu capacidad de adaptación.
Si tienes cualquier duda puedes escribirme a través del formulario de contacto o los comentarios que encontrarás más abajo.